Cuenta Inteligente de Evo

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Evo viene desarrollando una de las cuentas con mayor remuneración del mercado bancario nacional. Se denomina Cuenta Inteligente, que permite a sus titulares conseguir un tipo de interés del 1,10%, y que además podrá cobrarse de forma mensual.

Se trata de una cuenta a plazo que se distingue porque genera dos cuentas que están conectadas entre sí. Por un lado, una corriente al 0,20% desde el primer euro, y por otra parte, una segunda destinada a los ahorros, que eleva la rentabilidad hasta el 1,10% (renovable automáticamente cada cuatro meses), una de las más altas del mercado, y con la posibilidad de cobrar los intereses todos los meses.

Otras de las aportaciones que conlleva la contratación de este producto consisten en que está confeccionada exenta de comisiones y otros gastos administrativos. Pero también con la posibilidad de retirar efectivo de los cajeros automáticos con sus tarjetas de débito de forma totalmente gratuita, así como la disponibilidad de todos los ahorros, en cualquier momento y sin penalizaciones.

No obstante, para aprovecharse de estas ventajas será necesario que los usuarios bancarios domicilien su nómina o pensión. Y en caso de no poder formalizar este proceso, bastará con cinco recibos domésticos (agua, luz, gas, telefonía, etc.). Y una vez aplicados estos requerimientos ya podrá disfrutarse de las ventajas de esta cuenta a plazo.

Dentro de la oferta promocional de este nuevo grupo bancario se permite a los clientes que puedan probar esta cuenta durante tres meses. Las condiciones en su rentabilidad, por otra parte, son renovables automáticamente según la remuneración vigente.

Conformándose de una de las cuentas con mayor interés, precisamente porque sus intereses son de los más altos de todo el mercado bancario, aunque con unas condiciones muy particulares, que deberán ser revisadas por los particulares que estén interesados en este producto destinado para el ahorro.

Y que supone, finalmente, una nueva estrategia para mejorar los pobres márgenes en este tipo de productos, que raramente superan la barrera del 0,50%. Aunque sí están instalados en su comercialización sin ningún tipo de interés.