Cuentas de alta remuneración

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Si lo que deseas es obtener una mayor remuneración para tu cuenta corriente lo tendrás muy difícil. Su rentabilidad, en el mejor de los casos, está cercana al 0,50%. Y para mejorarla tendrás que cambiar de hábitos con tu banco. Principalmente a través de una mayor vinculación con él, contratando otros productos (planes de pensión, seguros, etc.). De esta forma, podrás mejorar la remuneración de tu cuenta en algunas décimas más, llegando incluso a sobrepasar el 1%.

Otra opción para los usuarios bancarios se basará en que domicilien su nómina o pensión, y también obtendrán una mejora en sus beneficios, y en la misma intensidad que en el caso anterior. Puede que éste no sea tu caso, y te encuentres en la situación de aceptar otros modelos menos exigentes. Seguramente los encontrarás en la actual oferta en este tipo de productos bancarios.

Son las denominadas cuentas de alta remuneración. No son muchas, y cada vez se están reduciendo en su actual oferta. No obstante, algunas entidades de créditos las han desarrollado para que sus clientes puedan beneficiarse de estas ventajas. Parte de la estrategia de elevar sensiblemente su remuneración, hasta prácticamente triplicar el tipo de interés que aplican en la actualidad.

Pero si quieres contratarlas, deberás conocer que tendrás que cumplir con una serie de requisitos para lograr estos objetivos. Por un lado, deberás aportar un saldo mínimo, por encima del de otras cuentas. Y por otra parte, cumplimentar con unos requerimientos en los que te exijan una mayor vinculación con tu entidad financiera.

Solamente de estas formas podrán conseguir que a partir de ahora el dinero guardado en tu cuenta te rente más, e incluso obtener otra clase de beneficios colaterales. Entre ellos, eximirte del pago de comisiones, transferencias gratuitas, tarjetas de débito y crédito de forma gratuita, y hasta la posibilidad de suscribir un seguro bajo descuento.

No es que ganes mucho más en la contratación de estos productos, pero sí que al menos generarás que tu saldo a final de año sea más satisfactorio para tus intereses, solamente con el cambio de cuenta.